Buscando menos temperaturas nos hemos venido al norte. Sigue haciendo bastante calor, pero solo si te expones al sol, y es muy llevadero porque refresca mucho por la noche. Compruebo con alegría, además, que tener la mente ocupada aleja la angustia existencial.
Te escribo unas líneas como cada sábado, y cada vez que se me ocurre, ahora que tengo más tiempo. Pero no importa estar lejos de lo cotidiano, antes de dormir, igual que en casa, te llamamos papá y yo, ¿tú nos oyes?
Creo que sí. Gracias por los guiños, vamos en tu busca. Nunca te olvidamos.