Abrazos desde casa

Hola, cariño, qué gusto escribirte ya en casita. Todo bien, después de una semana de mucha actividad.

Sigue siendo raro regresar y no encontrarte. ¿Donde andas Rodrigo? Ojalá nos veas. Ojalá nos cuides. Ojalá volvamos a vernos.

Vamos camino de diecinueve años de ausencia y nuestros pobres cerebros sólo procesan el presente. Pero, aun así, te escribo, te pienso, te añoro y te quiero. Aunque se me diluyan los datos sobre ti, hijo, (será que me hago vieja), yo resisto.

No te olvido. No me olvides tú, por favor.

Millones de abrazos, risas, cuentos, libros, pelis, canciones y series. Millones de besos, muecas y disfraces. Te queremos.

Marcar el enlace permanente.

Comentarios cerrados.