
Nuevo mes y nuevo curso empiezan ya. Seguimos esperándote, Rodrigo. Aunque casi, solo casi, hemos llegado a comprender que no es posible tu vuelta, te esperaremos siempre.
Al parecer todos entramos en una etapa de optimismo y nuevas oportunidades. Gracias por tu ayuda. No dejes de velar nuestros pobres caminos.
Vuela alto, hijo.Te queremos.